Efectuar pagos digitales sin conexión a Internet ya es posible
G+D ha introducido en el mercado «G+D Filia Unplugged», una innovadora solución de pagos digitales que no requiere conexión a Internet, y que permite realizar transacciones seguras mediante tecnología de tokens, superando así la limitación de depender de una conexión de red para efectuar este tipo de pagos.
La solución opera de manera similar a los servicios de streaming que permiten descargar contenido para su uso sin conexión. En G+D Filia Unplugged, los tokens monetarios se almacenan en dispositivos hardware de los usuarios, como la tarjeta SIM de un smartphone, permitiendo efectuar pagos a otros dispositivos sin necesidad de estar conectados a la red, a través de tecnologías como la Comunicación de Campo Cercano (NFC).
“Los pagos sin conexión son el eslabón perdido en el ámbito de los pagos digitales y con esta solución ofrecemos capacidad de pagar sin conexión para mejorar la inclusión financiera y la resiliencia de los pagos, respaldar funciones similares al efectivo en el mundo digital e impulsar aplicaciones innovadoras para la economía basada en tokens”, explica Raoul Herborg, director del área de Moneda Digital de Bancos Centrales de G+D.
Pagos digitales sin internet
Esta solución ha sido desarrollada con tres niveles de seguridad y ofrece características comparables al dinero en efectivo, garantizando confiabilidad, seguridad y confianza en las transacciones. Está diseñada para facilitar pagos tanto entre individuos como entre empresas y puede integrarse con las soluciones de pago digital ya existentes, incluyendo sistemas bancarios tokenizados, pagos instantáneos y servicios de dinero móvil.
Así es la solución de Giesecke+Devrient (G+D) para pagos digitales sin necesidad de conexión a Internet
G+D Filia Unplugged asegura la efectividad de los pagos en áreas con mala o nula conectividad, como zonas rurales o urbanas con fallos de red o apagones. Además, es especialmente útil en países en desarrollo donde las infraestructuras de Internet son inestables, impidiendo el acceso de los usuarios a servicios financieros.
Y es que, la capacidad de realizar pagos offline es fundamental en las estrategias de los bancos centrales para el desarrollo de monedas digitales. Asimismo, bancos comerciales, fintechs, sistemas de pago instantáneo y proveedores de servicios de pago móvil pueden beneficiarse de la integración de capacidades offline, ampliando su base de clientes y mejorando la inclusividad financiera.
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