¿Sirve para algo un motor en las antenas de un router WiFi?
El fabricante TP-Link ha presentado en el CES 2022 un router revolucionario, el nuevo modelo es el TP-Link Archer AXE200 Omni, un router tope de gama que incorpora conectividad WiFi 6E para proporcionar el mejor rendimiento posible, varios puertos Ethernet con velocidades de 10G, 2.5G Multigigabit para WAN/LAN y también puertos Gigabit Ethernet para la LAN. Lo más destacable de este nuevo modelo es que tiene un motor en las antenas WiFi, es decir, dispone de antenas mecánicas giratorias, por lo que pueden adaptar su orientación dependiendo de la ubicación del usuario. ¿Estas antenas mecánicas sirven para algo o tan solo es marketing para vender estos equipos que prometen mejor cobertura?
¿Antenas con un motor para girarlas?
La principal característica de este nuevo router es la incorporación de cuatro antenas externas que son mecánicas giratorias. Esto es una novedad y una disrupción total, porque no hay ningún router WiFi doméstico que disponga de esta funcionalidad. Esto sirve, en teoría, para adaptar la orientación de las antenas en relación a la ubicación del usuario, para asegurarle una cobertura óptima en todo momento, y que pueda conseguir velocidades ultrarrápidas. Según TP-Link, este ajuste automático de las antenas elimina la necesidad de ajustarlas de manera manual.
Ya existen las antenas omnidireccionales
Todos los routers domésticos disponen de antenas omnidireccionales, ya sean antenas internas (que están dentro del propio router, y colocadas en diferentes posiciones) o antenas externas (que las colocamos nosotros). Esto significa que las antenas incorporadas en los routers son capaces de proporcionar una cobertura de 360º en el plano horizontal. Si colocamos las antenas de forma vertical, la cobertura que emiten horizontalmente es a todas direcciones, sin embargo, dependiendo de la ganancia de la antena, el ángulo vertical será mayor o menor. Cuanta mayor es la ganancia de la antena, menor será el ángulo vertical, y cuanto menor sea la ganancia de la antena, mayor será el ángulo vertical. Generalmente los routers domésticos disponen de antenas con una ganancia de unos 4dBi aproximadamente, por lo que en el plano horizontal tendremos 360º y en el plano vertical tendremos unos 30º-40º aproximadamente.
Si tenemos varios pisos en nuestra casa, habremos notado que la cobertura también llega al piso de arriba, y en ocasiones, llega con muy buena velocidad. Esto se debe a que la señal WiFi rebota por los diferentes obstáculos hasta que llega a donde está el cliente inalámbrico, además, los routers actuales disponen de varias tecnologías para optimizar la cobertura en lugares alejados donde haya muchos rebotes de señal.
Y también el MIMO y Beamforming
A partir del estándar WiFi 4 disponemos de varias tecnologías que han ido evolucionando y mejorando con el paso de los años, estas tecnologías son:
- MIMO: los routers a partir de WiFi 4 disponen de varias antenas WiFi para recepción y emisión, esto significa que podremos enviar señal WiFi desde varias antenas simultáneamente, pero con un desfase de señal para que no interfieran entre sí. Esto permite que, si una antena WiFi no proporciona cobertura adecuada, con la ayuda de otra antena (o de varias) que puede estar en otra posición, sí seremos capaces de conseguir buena velocidad.
- Beamforming: esta tecnología que también se incluyó a partir del estándar WiFi 4 permite «estudiar» los rebotes de señal y dónde está ubicado el usuario, con el objetivo de «focalizar» la señal allí donde esté. En lugares cercanos al router no notaremos ninguna mejoría, pero a distancias medias-alejadas sí notaremos una mejoría bastante importante con respecto a un router WiFi que no disponga de esta función, o que la tenga desactivada.
Cualquier router actual dispone de estas funciones, e incluso más avanzadas, ya que tenemos el Beamforming implícito y explícito, y el MU-MIMO para transferir y recibir datos desde varios clientes simultáneamente.
Colocación de las antenas
La colocación de las antenas es algo muy importante para un router WiFi, ya que, dependiendo de su colocación, podremos tener mayor o menor cobertura. Como dijimos anteriormente, existen dos tipos de routers: los que tienen antenas internas y los que tienen antenas externas.
Los routers que tienen antenas internas no podemos moverlas, lógicamente, pero internamente están ubicadas en diferentes lugares del router y en diferentes posiciones, para intentar radiar a todas direcciones como si fuera una esfera de cobertura WiFi, y que nosotros estemos dentro de esta esfera. Si tenéis un router WiFi con antenas internas, habréis notado que la cobertura horizontal y vertical (si tenemos varios pisos) es muy buena. Es porque tiene antenas omnidireccionales y están colocadas en diferentes posiciones.
Los routers que tienen antenas externas sí podemos moverlas, y lo lógico sería colocar algunas de ellas de forma vertical, y otras colocadas a unos 45º del plano horizontal, con el objetivo de proporcionar buena cobertura vertical, similar a lo que se hace en las antenas internas de un router WiFi. En casos extremos donde tengamos varias plantas, podemos colocarlas en un ángulo de unos 30º respecto al plano horizontal, para que la cobertura llegue algo más directa, pero en principio no es necesario: por los rebotes de señal, por el MIMO y por el Beamforming.
Un motor en las antenas no aporta nada
Este nuevo router de TP-Link dispone de un total de cuatro antenas externas que se mueven con un pequeño motor, son antenas mecánicas giratorias, por lo que girarán dependiendo de dónde estén situados los clientes. Esto hace que nos hagamos varias preguntas, la primera de ellas es si las antenas son omnidireccionales, porque si son omnidireccionales no es necesario que giren, porque la cobertura en el plano horizontal ya es de 360º.
La segunda pregunta que nos hacemos es, por las fotos se puede ver que las antenas se mueven en el plano vertical, sí podría ser interesante en determinados casos donde tengamos varias plantas en casa, pero si tenemos varios clientes WiFi conectados en diferentes lugares (que es lo más normal), ¿qué hará el router? Porque si se mueve podría beneficiar a algunos para perjudicar a otros, por lo que nos quedamos igual.
Lo más habitual con un router WiFi con antenas externas es colocarlas de diferentes formas, y no moverlas nunca, porque simplemente no es necesario estar moviéndolas continuamente, lo que ganamos de cobertura en ciertos escenarios lo perdemos en otros.
Finalmente, está la pregunta del mantenimiento de estos motores en las antenas. Si las antenas son mecánicas, llevarán un motor y es posible que necesite un cierto mantenimiento, e incluso podría hacer demasiado ruido al moverse, sobre todo lo notaremos si el router lo tenemos en el salón o en una habitación.
TP-Link no ha indicado ningún precio de este router, ni tampoco cuándo estará disponible. Al tener un hardware de gama alta, y también la función de motorizar las antenas, creemos que es un equipo que no bajará de los 500 euros aproximadamente, un precio realmente elevado, y que tendrá un sobrecoste adicional por el simple hecho de tener las antenas con motor.
El artículo ¿Sirve para algo un motor en las antenas de un router WiFi? se publicó en RedesZone.
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