Si usas una VPN en estos casos, es un error y debes evitarlo
El uso de las VPN es algo que está muy extendido hoy en día. Las podemos utilizar tanto en ordenadores como en dispositivos móviles. Aunque son útiles en determinadas circunstancias, como por ejemplo para cifrar la conexión en redes públicas u ocultar la IP real, en otras ocasiones puede ser un error usarlas. En este artículo nos vamos a centrar en esto último. Vamos a explicar cuándo no debes usar una VPN si quieres mantener una buena conexión.
Cuándo no usar VPN
Debes tener en cuenta que la seguridad debe estar por encima de todo. Si vas a usar una red Wi-Fi pública, por ejemplo, siempre conviene que te conectes a través de una VPN. En otras ocasiones, cuando estás en una red que conoces o ves que la seguridad no corre peligro, entonces sí puedes decidir prescindir de este tipo de programa.
Ver vídeo en Streaming
Un ejemplo claro de cuándo es un error utilizar una VPN es a la hora de reproducir un vídeo en Streaming. Por ejemplo si vas a ver una serie en Netflix o un vídeo en YouTube, salvo que sea necesario que uses una VPN para evitar el bloqueo geográfico, no deberías utilizarla si buscas que funcione lo mejor posible.
¿Por qué decimos esto? El uso de una VPN tiende a ralentizar la conexión. La velocidad de Internet va a disminuir y eso va a hacer que los vídeos se corten o que no puedas reproducirlos a la máxima calidad. Por tanto, en estos casos conviene desconectarla y navegar directamente sin ella.
Descargas
Algo similar ocurre a la hora de descargar algún archivo de Internet. Si estás en una red segura, donde no tienes ningún peligro, lo mejor puede ser apagar la VPN y descargar el contenido con normalidad. De esta forma la descarga irá más rápida y no tendrás problemas de cortes que puedan aparecer.
Por tanto, si vas a usar alguna aplicación para descargar archivos o directamente desde el navegador, para lograr una velocidad óptima y no tener problemas lo ideal sería que no tuvieras la VPN conectada en ese momento.
Realizar una videollamada
También a la hora de realizar una videollamada vas a necesitar una buena velocidad de Internet, sin que aparezcan cortes y, en definitiva, que funcione correctamente. De lo contrario podrías tener problemas para usar programas como Skype o similares, que van a necesitar que todo vaya bien.
Una VPN podría hacer que esa videollamada empiece a ir mal, que se vea a baja calidad o aparezcan los molestos cortes continuos. Igual que en los casos anteriores, convendría apagarla aunque sea momentáneamente.
Conexión muy débil
¿Tienes una conexión débil, con poca velocidad? Esto puede ocurrir, por ejemplo, si estás conectado por Wi-Fi y te encuentras muy lejos del router o punto de acceso. El dispositivo no va a recibir bien señal y la velocidad va a estar muy limitada. Aunque puedas navegar, puede que ciertos servicios no funcionen igual de bien.
Si en estos casos utilizas una VPN, todo va a ir algo peor. Esa velocidad de Internet va a estar más limitada y tendrás más opciones de sufrir cortes. Por tanto, deberías optar por desconectarla y evitar empeorar la situación.
En definitiva, en estas circunstancias sería un error utilizar una VPN. Siempre que sea posible y no suponga un problema para tu seguridad, puedes optar por desconectarla y así lograr que la conexión funcione mejor. Incluso a veces la VPN puede ser un peligro.
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