El mercado del cibercrimen francés genera de 5 a 10 millones de euros mensuales
Trend Micro, como parte de sus trabajos de investigación en la serie Cybercriminal Underground Economy, ha publicado una nueva investigación que, titulada “El underground francés: bajo un mando de extrema precaución”, proporciona una visión más cercana de las actividades que se llevan a cabo en el mercado clandestino del cibercrimen francés, así como de sus peculiaridades frente al underground de otros países analizados por Trend Micro.
Una mirada al underground francés revela algo sobre el mercado: lo que ocurre en sus foros de la Deep Web, sus mercados y autoservicios tiene implicaciones en el mundo real. Dada la prohibición de portar cualquier tipo de arma en Francia, el mercado está plagado de armas pequeñas que pasan desapercibidas, tales como cuchillos y armas de fuego diseñadas para parecerse a un bolígrafo común. Los kits de eutanasia / suicidio, algo que no se encuentra en ningún otro underground de la ciberdelincuencia, también se venden en este mercado clandestino del cibercrimen francés, algo que resulta paradójico ante la adopción del país de la “ley de muerte digna”, que permite la “sedación profunda” para enfermos graves e incurables.
La reciente investigación de Trend Micro sobre el mercado clandestino del cibercrimen francés, pone de manifiesto que, si bien éste no es tan grande como el de Rusia o Alemania, ni tan avanzado como el de China, el underground francés tiene una identidad propia que lo distingue de los escenarios del underground de otros lugares. También, a diferencia de otros mercados clandestinos, el francés es muy reservado, con sitios web muy bien escondidos que, en ocasiones, requieren cuota de afiliación e investigación de antecedentes. A pesar de su carácter secreto y el alcance potencialmente limitado, el underground francés parece tener un importante mercado que cuenta con unos 40.000 miembros. Si bien se trata de un número relativamente pequeño, genera importantes ganancias. Según la Gendarmería Nacional y la Policía Nacional francesa, este colectivo factura de 5 a 10 millones de euros cada mes.
La investigación también ha demostrado que el cibermercado clandestino francés es característico por los exclusivos, algo muy alarmante, productos y servicios ofrecidos a los clientes en las tiendas y supermercados de la clandestinidad. Además de los artículos de contrabando habituales como las drogas y las armas, sus tiendas también están plagadas de servicios que ofrecen formas para evitar las leyes francesas. Algunos de los servicios específicos de este mercado incluyen ofertas relacionadas con los puntos del carnet de conducir o un servicio proxy para la creación de cuentas bancarias que permite a los compradores abrir cuentas de forma anónima.
También se ha encontrado a un vendedor que ofrecía kits de eutanasia/suicidio por 500 euros. Digno de mención en este caso en particular, además de su finalidad, es que a un potencial comprador se le pidió que pagara el doble en el caso de que lo quisiera usar con alguna otra persona más, lo que conlleva un asesinato por envenenamiento. Este producto fue adquirido por 600 euros, pagados en Bitcoins.
Fuente: Muyseguridad.net